Comentael P. Lacordaire: “Si fuese únicamente la justicia la que hubiese abierto el abismo, aún tendría remedio; pero es también el amor, el Primer Amor, quien lo ha hecho: he ahí lo que
rtp6vJP.Entonces según mi parecer, si creemos en el cielo también debemos creer en el infierno. El infierno está de algún modo escrito en la constitución del cielo. No obstante, las personas de buen corazón insisten en que no sería posible que un Dios bueno permita que alguien fuese torturado en el infierno para toda la eternidad.
Elinfierno, o el lago de fuego, también será el destino de los que rechazan a Cristo (2 Pedro 2:4-9). La buena noticia es que la gente puede evitar el infierno. Dios, en Su
Ylo que es aún peor, nuestra rebelión contra Dios nos hace merecedores de su justo juicio. Este juicio de Dios es otro aspecto importante del evangelio. También es la próxima célula en el tratado Dos Maneras de Vivir. El soporte bíblico que se da para el juicio de Dios está en Hebreos 9:27.Estáconvencido de que el rechazo de Dios es condición absoluta para la realización humana. Escribe en El existencialismo es un humanismo: “Todo está permitido si Dios no existe, y, en consecuencia, está el hombre abandonado, porque no encuentra en sí ni fuera de sí una posibilidad de aferrarse. El hombre está condenado a ser libre”. Deacuerdo a la Biblia, todos hemos rechazado a Dios y merecemos el infierno eterno. Ninguno merecía el cielo pero Dios nos amó y dio a su hijo para que fuésemos salvos por el. El hecho de que alguien rechace a Cristo y la verdad acerca de Dios, no hace a Dios responsable de que tal persona vaya al infierno. Si nos damos
Comentael P. Lacordaire: “Si fuese únicamente la justicia la que hubiese abierto el abismo, aún tendría remedio; pero es también el amor, el Primer Amor, quien lo ha hecho: he ahí lo que
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